En el presente blog se mostrará
un poco acerca del autor Robert Louis Stevenson, pues después de indagar un
poco acerca de los temas que aborda cada una de sus obras, nos interesó el
camino por el cual iban los relatos de este novelista; que incluye crónicas de
viaje, así como novelas de aventuras e históricas. Este autor, es uno de los clásicos
de la literatura juvenil, además presenta obras muy importantes como: “El
extraño caso de Dr. Jekyll y Mr. Hyde” que es un clásico de la literatura
goth o “La isla del tesoro” que va más de aventura. Para este blog, se
hablará de 3 cuentos (que como sabemos el cuento es un subgénero narrativo
mayor) de este autor. Cabe mencionar que nos parecieron llamativos los cuentos
“Ladrón de cadáveres”, “El Diablo en la botella” y “Janet la
torcida” por la trama que cada uno de ellos aborda y de los cuales se hará
un pequeño análisis a lo largo de este blog.
Sin embargo, hubo uno que captó
nuestro total interés ya que la forma de narrar que Robert Stevenson escoge es
totalmente envolvente, cada vez te adentra más a la historia y de alguna manera
te hace empatizar con los personajes. Este cuento es “El diablo en la botella”,
que nos da una reflexión acerca de como los humanos nos dejamos llevar mucho
por las riquezas materiales y el dinero, es decir, sobre la avaricia, ya que es
algo que se ve desde que el protagonista inicia con la botella hasta el último
hombre que se la queda. También nos da una reflexión acerca de que las cosas
podrían parecer muy malas y que no hay solución, pero siempre hay un rayo de
esperanza. Nos parece que pudimos crear, o más bien, identificar el pacto de
ficción, cuando nos comienza a decir lugares conocidos, como lo es Hawái o San
Francisco, cuando nos describe como es Kokua y en la manera en cómo ella y Keawe
(que en realidad no sabemos el verdadero nombre de este personaje) manejan sus
pensamientos, sus comportamientos y conductas. Por otra parte, en este cuento
podemos notar, que a diferencia de “El ladrón de cadáveres” que tiene
una focalización externa, este da la idea de tener una focalización cero, que a
nuestro parecer es difícil de identificar, ya que pudiera parecer que esta
narrando lo que le sucede a otra persona y solo eso, sin embargo, si ponemos
mucha atención nos podemos dar cuenta que también menciona lo que los
protagonistas sienten y piensan.
No quisiéramos terminar esta pequeña introducción sin antes mencionar que el mayor aprendizaje que nos ha dejado leer estos textos ha sido el gestionar nuestros deseos, y tener cuidado con lo que deseamos ya que no sabemos las verdaderas consecuencias que esto podría traer, el cómo a las mujeres por ser conocedoras de algo o por haber vivido ciertas situaciones las tachaban de brujas y de cómo desde tiempos muy atrás se ha investigado la anatomía de los cuerpos con cadáveres. Por otra parte, hemos reforzado conocimientos en esta materia de temas que ya conocíamos, pero solo de manera superficial como las voces narrativas, que solo conocíamos cuales eran pero no como podíamos identificar cada una, y aprendido otras, como lo es la focalización, el canon literario y el contrato de ficción que fueron los más importantes para nosotros, ya que nos sirvieron para el análisis de estos textos, y que de igual manera, nos seguirán sirviendo para cualquier otro escrito, e incluso, de ser el caso, para poder escribir uno.
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